La falta de oportunidades laborales es una característica común en las zonas rurales del estado Mérida. Y esta condición la experimentan principalmente las mujeres.
NTA habló con una joven que vive en Mucuchies, la capital del municipio de Wrangel, que es profesional pero actualmente está desempleada.
Sin oportunidades laborales
Naila Peña, una joven de 28 años, es psicóloga social de profesión, y expresa a los medios su preocupación por la falta de oportunidades laborales en el páramo de Mérida. Pero asegura que no es el único que se enfrenta a esta realidad, especialmente en una zona donde actividades como la agricultura o el turismo se han visto reducidas y están colapsando debido a una emergencia humanitaria compleja.
“Se ha convertido en un desafío para los jóvenes encontrar trabajo en Rangel, debido a la falta de oportunidades, estoy enfrentando una realidad desalentadora como profesional” Indio.
Según Nyla, su esfuerzo y compromiso para completar su carrera y obtener un título universitario se ha visto limitado por las pocas oportunidades laborales para ejercer su profesión. “Esta situación no es exclusiva de mi caso, muchos jóvenes dentro del municipio de Rangel están pasando por un panorama similar”, agregó.
La joven rangel atribuye esto a la masiva falta de inversión en el sector público y al grave estado de la situación económica del país, que ha reducido significativamente las oportunidades de empleo formal.
“Hay muy pocas opciones para ejercer mi profesión en este ámbito. En mi búsqueda de empleo visité diversas empresas públicas y privadas y no conseguí trabajo. Él declaró.
Falta de apoyo gubernamental
Destacó que muchos puestos de trabajo requieren experiencia previa, lo que resulta demasiado complicado para los jóvenes recién graduados. Además, impide cualquier elección al reducir las brechas para ingresar al mercado laboral. Un gran número de jóvenes se encuentran en trabajos informales donde no tienen acceso a prestaciones legales, lo que precariza sus vidas.
Asimismo, esta joven dice que la población del municipio Rangel necesita apoyo del gobierno. Especialmente en áreas que priorizan a la juventud, como la salud mental, la prevención de la violencia y el desarrollo comunitario.
Por eso, subraya, es muy importante allanar el camino para que los niños participen en la reconstrucción del tejido social. En tu caso personal, aporta todas las herramientas y capital humano que tengas para tal fin.
“Sin embargo, la falta de oportunidades laborales limita mis capacidades para contribuir al bienestar de mi comunidad. Situación que afecta no sólo mi desarrollo profesional sino también mi futuro personal”, destacó.
Asimismo, Nyla comenta que la incertidumbre económica y la disminución de las oportunidades laborales han creado ansiedad y desánimo. Esta situación lleva a muchos jóvenes a considerar la migración como su única oportunidad de encontrar oportunidades dignas.
En este sentido, Peña llama a las autoridades nacionales y locales a tomar acciones para solucionar este problema impulsando una mayor intervención del sector público y programas que impulsen la creación de empleo en diferentes áreas.
Finalmente, agrega, es necesario fortalecer la vinculación entre universidades y empresas privadas con el objetivo de asegurar empleo a los recién egresados, porque el municipio cuenta con talento humano y capacidades.