Un reciente video del comediante venezolano Marco Pérez, conocido como Marco en las redes sociales, se volvió viral en Tik Tok y generó reflejos y nostalgia entre los internautas. El material audiovisual menciona algunas de las costumbres que marcan la celebración de Año Nuevo y resalta un aspecto importante: la ausencia de familiares por la migración venezolana y explica el síndrome de la silla vacía.
@marko La distancia duele 💔♬ Sonido original – Marko
El video, protagonizado por Elsa Escobar, Marco Pérez y Peeta Mejías, muestra la realidad de muchas familias venezolanas. Debido a muchas circunstancias, abordan estas fechas con distancia física en lugar de intimidad emocional. La situación es particularmente común entre los adultos mayores en Venezuela que utilizan la tecnología para comunicarse con hijos y nietos que viven en el extranjero. Cuando la soledad y la tristeza los calma.
Luis Francisco Cabezas, director general de la Asociación Civil Convite, afirmó en declaraciones a Unión Radio en octubre de 2024 que alrededor del 10% de las personas mayores en Venezuela. Es decir, unas 480 mil personas viven sin apoyo familiar y con unos ingresos no superiores a los 10 dólares mensuales.
Éxodo venezolano y tragedia migratoria
La crisis migratoria, que se intensificó en 2015, continúa desplazando a miles de personas debido a la compleja situación económica, política y social del país. Según datos de la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR), más de 7,7 millones de venezolanos viven actualmente fuera de su tierra natal.
Giseth Rodríguez, psicóloga especializada en duelo y depresión, dijo que el éxodo migratorio está afectando profundamente la salud mental de las personas mayores en Venezuela. “La soledad es uno de los factores más comunes, ya que muchos de ellos se encuentran en un vacío emocional sin la compañía de sus seres queridos”, opinó. Asimismo, la falta frecuente de comunicación afecta la salud emocional, lo que puede traducirse en tristeza, depresión y reducción de la calidad de vida.
Asimismo, expertos en los campos de la psicología y la sociología advierten que el malestar migratorio afecta tanto a quienes se van como a quienes se quedan. Dicen que los familiares en Venezuela sufren de depresión, ansiedad, estrés y síndrome de la silla vacía en una situación de abandono.
Síndrome de la silla vacía
En entrevista con Yorelis Acosta, Psicóloga Clínica y Social y Centro de Estudios del Desarrollo (Centes UCV), el síndrome de la silla vacía hace referencia a la tristeza que provoca la ausencia o pérdida de un ser querido. Las emociones se intensifican durante las vacaciones debido a la esencia del compartir en familia. Acosta explicó que la ausencia de un ser querido, ya sea por muerte o por desplazamiento, genera esta temporada de anhelo. Está representado por el valor del índice de búsqueda y unión para la conexión.
Génesis Recine, emprendedora y fundadora de Yeyito App, señaló que la silla vacía es una forma de expresar el malestar de los migrantes. Dijo que muchos venezolanos dentro y fuera del territorio experimentan este síndrome, quienes lo consideran una forma de duelo y miedo a no volver a ver ni a encontrarse con sus familiares. “Los efectos psicológicos son comparables a la soledad, la depresión y el estrés, lo que conduce a un colapso emocional”, afirmó, refiriéndose a los efectos del síndrome de la silla vacía.
Enviar dinero no es suficiente
Recine compartió la experiencia de una visita por la App Yeyito a un hombre que vivía solo en su casa en el municipio de Chacao. La hija del hombre, que vive en Estados Unidos, desconocía el deterioro físico y mental de su padre y las peligrosas condiciones en las que vivía, a pesar de que le devolvieron el dinero y el dinero.
El cofundador de la aplicación Salud para las Personas Mayores reconoce que la evacuación venezolana ha dejado a más de 400.000 personas con daños emocionales y psicológicos. Prometió que el dinero o las remesas no eran suficientes; Sugirió que se necesita apoyo emocional y que los familiares fuera de Venezuela se contacten y mantengan el contacto.
El síndrome de la silla vacía es parte de nuestra realidad
Yorelis Acosta consideró que el síndrome de la silla vacía era parte de la realidad venezolana. “Llevamos años lidiando con esta ausencia y los cambios derivados del proceso migratorio. Ahora es habitual tener teléfonos sobre la mesa para dar la bienvenida al Año Nuevo o decir Feliz Año Nuevo en diferentes zonas horarias. Es nuestra forma de permanecer en contacto con gente que está lejos”, dijo.Ante la cantidad de personas mayores que viven solas en Venezuela y los millones de migrantes que añoran el Año Nuevo, ofreció algunas sugerencias para estas fiestas.
- Haga nuevas conexiones sociales, conéctese con sus amigos y vecinos.
- Comparte el horario, no te quedes solo, invita a amigos o vecinos. Es momento de conectarnos y conocernos.
- No te detengas en recuerdos de momentos en los que no participaste en un evento o situación triste, estos te robarán tu felicidad. Recuerde los momentos de esperanza y hable con los de afuera y comparta testimonios.
- Reflexiona sobre los aspectos positivos logrados este año, resalta tus fortalezas y estrategias para superar los desafíos. Concéntrate en cómo superaste y triunfaste durante un año lleno de dificultades, tristezas y desafíos.
- Renunciar a los recuerdos; No te detengas en recuerdos negativos; Incluye momentos en los que tus esfuerzos y los de tus seres queridos marcaron la diferencia.
- No deberías ser el alma de la fiesta; Está bien sentir nostalgia en diciembre, pero no te encuentres en ese estado emocional.
Acosta recordó ese servicio
La Alcaldía de Baruta ofrece sus servicios de atención presencial o en línea a quienes necesitan asesoría psicológica.