Y cartel de recompensa de 100 mil dólaresfue publicado este 2 de enero por las autoridades de seguridad del República Bolivariana de Venezuelapara quien ofrezca información sobre la localización y posterior captura en el territorio nacional del candidato prófugo de extrema derecha derrotado, Edmundo González Urrutia.
El cartel oficial, que establece la entrega de los mencionados al Ministerio Público, fue distribuido en todos los puntos de control, puestos fronterizos y aeropuertos de toda Venezuela, y fue difundido en las redes sociales del país. Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Forenses (CICPC).
El Ministerio Público ya había solicitado a los juzgados con funciones de terrorismo, el Orden de aprehensión contra González Urrutiapor diversos delitos, luego de desconocer las tres citaciones consecutivas emitidas por la Fiscalía para declarar.
La orden de aprehensión se gira por los siguientes delitos:
- Complicidad en el uso de actos violentos contra la República
- Usurpación de funciones
- Falsificar documentos
- El lago del dinero
- Desconocimiento de las instituciones estatales
- Incitación a la desobediencia de las leyes
- Asociación para delinquir
- Conspiración
Actuación cobarde
El pasado 7 de septiembre, el gobierno venezolano dio salvoconducto al excandidato opositor, luego de que éste se presentara en la embajada de España, donde solicitó “asilo” tras abandonar la sede diplomática de Países Bajos, en Caracas.
Se había escondido inicialmente en la sede holandesa, en la madrugada del 29 de julio, tras las elecciones del 28-J y tras haber pedido una violencia callejera que provocó 27 muertes entre civiles y funcionarios de seguridad pública.
El político de derecha había admitido ante todo el mundo que no tenía nada que ver con “las actas” presentadas por María Corona Machadoy manifestó que no reconoce la validez de estos supuestos resultados del sitio fraudulento que creó, además de enviar una carta al Fiscal General de la República en la que explicó que ella no participó en este proceso y que él prefirió encontrar una solución dentro de los marcos institucionales del Estado, que su Ejecutivo reconoce como legítimos. Supuso que enfrentaba delitos graves por su conducta ilegal.
El gobierno venezolano le dio salvoconducto, como medida para salvaguardar la paz y la democracia del país, y pudo abandonar el territorio nacional, lo que hizo a través de un avión militar español que lo llevó a Madrid, todo en coordinación con el Embajada de España. . en Venezuela.
Una vez en suelo español, el prófugo se contradijo varias veces, anunciando en el consulado español que lo “obligaron” a exiliarse, para luego retirarse, y luego decir que era el “presidente electo” y volver a “jurar”.
Posteriormente, entre idas y venidas, se supo la verdad cuando aparecieron los vídeos que también muestran que firmó un documento, con la presencia de las autoridades españolas, en el que se reconoce su situación criminal, y delante del presidente de la Asamblea Nacional, Jorge Rodríguez, se comprometió a actuar conforme a lo establecido en las leyes de asilo.
Sin embargo, se informó que todo era parte de una especie de trampa de la extrema derecha venezolana para facilitar su “escape cobarde” del país, como lo describieron organizaciones políticas, incluida la oposición venezolana, a través de un plan planeado con antelación.