Los vecinos se ven obligados a realizar trabajos responsables del gobierno. Dicen que esta es la mejor manera de restablecer el tráfico vehicular, que lleva meses bloqueado.
San Cristóbal. La reparación de las calles de cualquier municipio debería ser responsabilidad de trabajadores especializados, costeados con el presupuesto anual del ayuntamiento y los impuestos locales. Pero no así en el municipio de Cárdenas, estado Táchira.
Los vecinos de la calle Venezuela del sector Barrancas Alta se sienten impotentes y frustrados al tener que pagar de su bolsillo materiales y mano de obra para reparar la vía.
A esta comunidad le resulta difícil proporcionar cemento, asfalto, maquinaria y salarios a sus trabajadores, lo que se ve afectado por la compleja crisis humanitaria que azota al país. Sin embargo, debido a los daños en la carretera, es necesario realizar las obras.
Una de las víctimas, José Sánchez, recordó que hace varios meses una tubería de alcantarillado se derrumbó y destruyó completamente la vía. Esto redujo a la mitad el número de vehículos que pasaban.
Como era imposible llegar a los estacionamientos de sus casas, actuó como motivación para resolver el problema a su manera.
Inicialmente, pidieron ayuda a la oficina del alcalde y a la fiscalía. El ayuntamiento les proporcionó 50 sacos de cemento, pero la mitad de la obra no se completó. El resto de artículos hay que comprarlos a los vecinos de la comunidad.
Cuando nos dieron el cemento tuvimos que hacer el trabajo nosotros mismos. “Le estoy pagando a un trabajador para que me ayude a arreglar la calle y ver si puedo dejarla como está”, dijo.
Señaló que esto no es nuevo, pues reconoce que en otros sectores de la región los vecinos han recaudado dinero para arreglar calles. Ahora les toca a ellos.
“No es nuestra responsabilidad”
Jairo Ordóñez, habitante de la zona, rechazó que los tachirenses ahora deban trabajar en la reparación de las vías, afirmando que el gobierno debe asumir esa responsabilidad, con los recursos que obtiene del pago de impuestos.
“Todas las calles se han convertido en nada. Aquí estamos viviendo en medio de agujeros porque nadie se ha comprometido a taparlos y lo mismo está pasando en todo el país”, afirmó.
Rechazó la responsabilidad que ahora debían asumir como ciudadanos. Explicó que cuando ellos hacen el trabajo, se termina mucho más rápido que lo que hace el gobierno.
Asimismo, debido al insuficiente suministro de materiales en la Alcaldía, no se contó con asistencia para el uso de maquinaria pesada. Se niegan a alquilarlos porque significa demasiado coste por hora.