Durante la temporada de luces y celebraciones, más de una docena de niños de entre 10 y 12 años venden bengalas y cebollas en la Avenida Bolívar, en el centro de Marrakech. Estos pequeños empresarios de Aragua buscan ganar dinero para comprar sus nuevos productos durante las fiestas navideñas del 24 y 31 de diciembre.
En un puesto, dos niños, uno de 11 y otro de 12, explicaron que estaban allí para ahorrar dinero y comprar ropa nueva para las fiestas. Conocen a niños de otros puestos, pero no trabajan juntos.
La madre de uno de los niños, Edward, es de la tribu. Explicó: “Él aprende a actuar de esta manera para no tener que trabajar para nadie. Nací y crecí aquí en el centro porque mis padres eran vendedores de la economía informal. Gracias a ellos estoy donde estoy hoy y tengo mi educación. Tengo una licenciatura, fui a la universidad y he tomado muchos cursos. “Trabajo en ello porque dependo de ello y apoyo a mis hijos en ello”.
¿Entorno adecuado para pequeños empresarios?
Eduard, uno de los pequeños empresarios de Aragua, tiene pequeñas estrellas y cebollas en una mesita sobre una columna de una estructura cercana al centro comercial Galleria Plaza. Ofrece productos mediante efectivo, pago móvil y tarjeta de débito. Cuando un cliente paga con tarjeta, Edward sale del puesto por un minuto para buscar a su madre, propietaria del punto de venta.
La madre de Edward comentó: “Todos mis hijos están en esto, yo tengo tres. El mayor estudia y me ayuda, Edward es el del medio. Les enseño cómo actuar para que no trabajen después”. Para tener miedo de esto, hay que ser positivo”.
La calle está llena de gente de todas las edades; La Avenida Bolívar es la más visitada durante esta época. Algunos vendedores adultos compartieron sus experiencias vendiendo los mismos productos a niños. “A veces la policía nos molesta porque son petardos, estrellitas y cebollas”, señala uno de los vendedores discapacitados. Dicen que debería venderse en las tiendas. Estoy aquí de 7 am a 6 pm y hay días que salgo con un dólar. Veo que estos niños también están en esos tiempos.
“Está bien trabajar durante las vacaciones”
Un vendedor local de Tostone dijo que estos niños “no son niños de la calle, son niños que vienen de casa para ayudar a sus padres. Ven que la situación económica de cada padre es difícil, “Por eso intentan aportar un granito de arena a sus hogares”.
Otro comerciante que vendía patinetas en la misma calle dijo: “La verdad es que está bien para las vacaciones, pero Tienen cosas importantes como estudios. Pero en vacaciones aprenden qué es el trabajo y aprenden a vender.
Algunos ven este trabajo como una oportunidad para enseñar a los niños a ser responsables y obtener ingresos adicionales en tiempos de “crisis económica”. Sin embargo, organizaciones como UNICEF y la OIT advierten de riesgos para la salud y el desarrollo de los niños. La Ley Orgánica de Protección a la Niñez y la Adolescencia (LOPNNA) prohíbe el trabajo infantil a menores de 14 años.
Pequeños Emprendimientos en Aragua: Negocios Informales
Según uno de los que caminaba por la Avenida Bolívar en busca de regalos navideños, “Venezuela tiene escuelas para pequeños empresarios, y ellos desarrollan habilidades y valores para desarrollar habilidades y valores. Propósito”. No sólo ellos mismos, sino también su país a través de su trabajo. En una Venezuela mejor, estos niños aquí en Bolívar tendrán acceso a esta educación financiera y empresarial donde aprenderán habilidades emprendedoras en un ambiente seguro.
La situación no es fácil y depende de muchos factores, pero está claro Estos pequeños empresarios merecen un futuro mejor y más seguro.