Una vez más, la destrucción de la raza humana es noticia, esta vez como resultado del uso de la inteligencia artificial. La oferta pública y gratuita de herramientas como ChatGPT ha posicionado a la IA en la agenda de noticias y opinión en general y en la conversación académica. No sólo por las consecuencias entre quienes están a favor o en contra, sino también porque los expertos que han contribuido a su desarrollo nos expresan sus reservas en una carta pública. Es cierto que se trata de una nueva tecnología disruptiva.
Me pongo al día con las últimas noticias a través de las noticias nocturnas o los programas de entrevistas de radio. Inteligencia artificial Y el acceso público es su nuevo retoño ChatGPT Vaya A mitad de camino. Mediante el uso de Instagram, un medio que prioriza la imagen sobre el texto escrito y la experiencia cotidiana, nos mostró (y entrenó) la operación algorítmica de creación, selección y difusión de contenidos sin pago. Sujeto a un conjunto de términos y condiciones, los usuarios autónomos, como las corporaciones, pueden publicar y consumir contenido que se considere de interés público.
Conocer un poco más sobre el nuevo fenómeno, AI más reciente que IG, no es difícil. A los pocos días sucedió algo extraordinario, y la información difundida se llenó de llamamientos y advertencias. Es decir, ante la aparición y uso de nuevas herramientas, se estima que hay más herramientas y menos aplicaciones, los propietarios y expertos en estas tecnologías han emitido una carta abierta exigiendo la prohibición de la creación de nuevas. ajustes. Además de los comentarios de los usuarios sobre las terribles consecuencias para la educación y la RTI, se han agregado algunas preocupaciones sobre el futuro a la terrible advertencia. Así va la conversación online y presencial.
Entre estos mensajes, puede haber un resumen: ¡Todo mal, amigos!
Publicaciones como comunicados de prensa sugieren que los estudiantes ya no son fuentes originales de investigación y que los políticos ya no promueven sus discursos interactuando con la gente. En este momento los docentes aprueban proyectos y tesis producidos con IA y los medios distribuyen imágenes de hechos e identidades inexistentes creadas con esta tecnología. Aprendí que el almacenamiento de datos es tan grande que permite que los algoritmos aprendan muy rápido y es muy útil para abordar problemas complejos de nuestra civilización, como el cambio climático o enfermedades aún incurables. Precisar los objetivos, condiciones y responsabilidades de tales procedimientos hoy no nos permite ver con claridad lo que vamos a observar. Podemos pensar que se refiere sólo a este problema, consecuencias y responsabilidades.
Las predicciones de innovación informática propuestas por académicos y expertos y publicadas por medios de comunicación creíbles iban desde la orientación académica hasta el alarmismo, y se destacó la cuestión de si las máquinas alguna vez lograrían una inteligencia similar a la humana. Tales complicaciones nos dicen que muy pronto una mente superior, la invención de nuestra especie, se protegerá de su creador y usuarios. Y luego lo que pasa es que el mundo se acabará en aproximadamente 5 a 10 años.
Y pensé en muchas cosas. Compartiré algunos de ellos practicando e implementando algunas ideas.
Mientras leía, haciendo un enorme esfuerzo por sofocar la repulsión que me provocaban las calamitosas premoniciones, me preguntaba: Chico, ¿soy humano?, ¿tenemos un pensamiento crítico integrado sobre los nuevos medios? Por supuesto, esta es una pregunta bomba, ya mi favor diría que quiero vivir. En esta prisa, como lo que se habla es el final de lo que sabemos y el principio de lo que se desconoce, si hay algo que podemos utilizar, como una nueva fase oscura, es el conocimiento. Basta saber que no se necesita mucho para aliviar el dolor al principio, con ignorancia y una voluntad fuerte e intensa.
¿Qué son los nuevos medios? Vayamos un poco más lejos.
Me refiero a aplicaciones, dispositivos (teléfonos móviles, consolas, computadoras, etc.) y diversos tipos de contenido que los usuarios distribuyen por su propia motivación. Por supuesto, lo más importante es que junto al usuario, un individuo, hay que incluir a las organizaciones públicas y privadas que utilizan sus contenidos y participan en esta transacción, y sin duda los grupos familiares. Su consumo ya no es colectivo, sino autónomo e individual. ¿Entonces que? Bueno, vale la pena leer los mensajes relacionados con su dirección, en ese sentido, para conocer los efectos que se suscitan en él, en su subjetividad y tejido conectivo.
Y luego me detuve con una pregunta más. Sería algo así… ¿Qué preguntas nos hacemos sobre esta forma actual de producción y consumo cultural? ¿Cuáles son los efectos en niños, adolescentes, adultos o ancianos? Y sobre los procesos educativos, culturales, políticos o económicos, ¿qué efectos se podrían reportar?
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Siguiendo estas preguntas, no es conveniente tener un sistema teórico con sus categorías y su lógica para comprender este complejo proceso de pensar la actualidad. ¿Quiénes son los estudiantes e investigadores en ciencias de la información, antropología, economía, filosofía y salud orgánica y mental que se hacen estas preguntas? A quién le importan los cuerpos afectados, los cuerpos de todos los humanos. O organizaciones sociales como universidades, institutos de investigación y, por supuesto, organizaciones culturales, organizaciones artísticas. Lo que dicen los artistas visuales, músicos o escritores y de qué obras hablan.
¿Dónde comienza este estudio?
El análisis de la realidad suele partir de una inquietud. Una inquietud inquieta permite plantear un buen par de interrogantes, en caso de huelga. Si el interesado es activo y está de buen humor, las señales en cuestión pueden rodear su propio deseo e incluso deseo de saber.
Es un alivio ir por ese camino de querer saber cómo obtener una explicación. ¿Pero cual? ¿Alguien lo hará? Entonces, en pleno furor exploratorio, aparece la palabra: verdad. ¿Cuál es la verdad? Realidad ¿Qué es la realidad? Sobre qué categorías podemos establecer un juicio de realidad.
Se sabe que las proposiciones teóricas son el resultado de un proceso intelectual, indudablemente científico, observando lo que ya se intenta aprender y comprender, nuevas formas de producción e intercambio de ideas que logran una materialización en soporte digital a través de las interfaces actuales. Y las aplicaciones sociales, como las videollamadas o la IA, tienen una distribución masiva que no existía hace 2 décadas.
Sí, la lógica de propagación de la información en 2010 era enorme en la configuración de uno a muchos. Libro, revista, radio, televisión y cine, pero también escuela, dirigente, partido político, Congreso. No hay tanta gente ni tantos dispositivos en esta cosa masiva. No existe ningún dispositivo capaz de dialogar, es decir, provocar una respuesta de la audiencia. En la primera década del siglo XXI la gente enviaba sus respuestas con votos, rating, strike, compra, participación, ayuda etc.
Además de este bajo vuelo sobre este fenómeno, es de carácter cultural, aunque las empresas técnicas demuestren que es un problema técnico con los hechos, vale preguntarse una vez más por los métodos con los que abordamos los fenómenos. Sabemos poco o nada al respecto. ¿Qué podemos decir? Pensar, observar, escuchar, argumentar y contrainterrogar desde diferentes posiciones, el resultado final es el conocimiento.
En algunos casos, para lograr tal fin, se toma la ruta de estudios abstractos y complejos de la estructura, lógica y composición que conforman un fenómeno observable. En otras ocasiones se trata de una comprensión de lo evidente, afirmando que al ser observado y sentido puede suponerse que ya existe y es conocido, ese conocimiento no puede evitar un cierto efecto de intercambio de prácticas, preferencias y creencias epocales e históricas. El primer enfoque podemos reconocerlo como saber ideológico, de carácter precientífico, y el segundo, que tiene un marco epocal e histórico cultural, debe preguntarse por este aspecto categórico, que se reconoce como saber científico.
Ahora IA.
Cuando apareció la inteligencia artificial, ya estábamos demasiado ocupados y demasiado ocupados consumiendo y produciendo contenido. Como broma tensa en este texto y ciertamente innecesario, os aseguro que me recuerda al éxito bailable del siglo pasado “El Barbarazo”. La urgencia de entrar en pánico es poderosa. Los titulares sobre la IA hablan de nuevas fuerzas incontrolables que pronto dominarán el destino de la humanidad hasta que desaparezca. No sé cómo es esto posible, pero duele pensarlo desde este punto.
Me gusta decir que la no renuncia es pensamiento. Pase lo que pase, aunque las sirenas del desastre no dejen de sonar, que su canto nos despierte para emprender esta nueva exploración. El conocimiento es siempre la victoria.
Este texto fue creado por un humano.