Anaisa Rodríguez
Por: Linda Rondón.
Desde sus inicios en el teatro, Simón Pestana ha visto este arte como una poderosa herramienta de transformación. Con la obra “El Vaso”, el actor venezolano te invita a un viaje introspectivo que te hará reflexionar sobre la vida, la muerte y la esperanza.
“El Vaso”, un potente drama escrito por Tabaré Feravel en 1964, llegó a manos de Pestana como legado. Después de años de espera y un periodo de profunda reflexión personal, el actor decidió llevar esta obra a escena. El monólogo cargado de emociones explora temas universales como la pérdida, la soledad y la búsqueda de significado.
Con el apoyo inicial del famoso escenógrafo Freddy Belisario, ¨El Vaso¨ cobró vida, a pesar de la pérdida de su amigo y colaborador, Pestana continuó con el proyecto, no sólo con la ayuda de Melissa Belisario, hija de su gran amigo, sino además se sumaron profesionales con experiencia en el área técnica, Arnovi Parra, Laura López, Wolmar Coronado, entre otros familiares y amigos que lo apoyaron, dedicaron y Funciona a la memoria de Freddy, el autor de la obra y de sus padres, quienes son para él el referente más profundo de desapego y amor.
Simón Pestana, encarnando esta poderosa historia, confiesa que “El Vaso” fue un regalo del destino. En un momento de profundo reconocimiento personal, este trabajo se convirtió en una luz guía que lo impulsó a enfrentar sus miedos y encontrar un nuevo significado a su vida.
A través de esta obra, Pestana transmite un mensaje de esperanza, invitándonos a reflexionar sobre nuestra propia existencia y encontrar consuelo en los momentos más difíciles. Es un llamado a la introspección y a la conexión con los demás.
“El Vaso” se presentará en el Centro Cultural Chacao del 6 al 8 de diciembre. Esta obra, dirigida, producida e interpretada por Simón Pestana, promete conmover al público y dejar una huella imborrable.
No pierdas la oportunidad de vivir una experiencia teatral única. “The Glass” es mucho más que una obra de teatro; Es un viaje de esperanza que toca tu alma.
