El mediodía del miércoles 18 de septiembre se registró un fuerte viento en Anzotequil, lo que generó pánico entre la población.
Más allá de eso Algunos bromearon en sus redes sociales diciendo que “el viento casi se los lleva”.La realidad es que los dos minutos de calor dejaron secuelas, pero nada que lamentar.
Árboles caídos, vallas y postes, y algo más. Techos elevados e incluso “camisetas sin mangas voladoras”. Aparte del miedo, eran parte de lo que el viento había dejado atrás.
Rosalía Teseda, que vive en el tercer piso de una casa ubicada en el sector Álvarez Bazares de Barcelona, se encuentra entre los aterrorizados por el fenómeno. «Como el techo es de zinc, pensé que en cualquier momento se derrumbaría.“Gracias a Dios no sucedió”, dijo.
El tránsito vehicular estuvo bloqueado por unos minutos
La capital de Barcelona y la ciudad de Lechería tras fuertes vientos en Anzoteguil Zonas que estuvieron congestionadas durante unos minutos.
Al inicio de la avenida Jorge Rodríguez (Barcelona) ha caído una farola pública bloqueando el paso por un canal. Ocurrió lo mismo, pero con árboles caídos, en las avenidas Juan de Urbin y Country Club.
Estos capítulos fueron enfrentados por comisiones de Bomberos, la Defensa Civil (PC) de cada localidad y la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec). Se prestó la debida atención a la reparación de las carreteras..
En Anzoátegui llegaron fuertes vientos y lluvias
Según Luzana Tiaba, directora de PC en Barcelona, La velocidad del viento era de 72 kilómetros por hora.. También opinó que las depresiones tropicales son el origen de la persistente depresión de Gordon.
De hecho, después de los fuertes vientos, llovió durante unos 30 minutos y luego desapareció. Algunas calles quedaron inundadas debido a un sistema de drenaje roto.
Asimismo, zonas como el centro de Barcelona quedaron sin luz durante varias horas. Por si fuera poco, algunas comunidades se quejaron Problemas de conexión a Internet de diferentes proveedores.