La ONG Observatorio de las cárceles venezolanas (OVP) aseguró que el número de presos en huelga de hambre en el estado Lara se asemeja 193 personascon la incorporación de una tercera instalación del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en esta región del centro occidente del país.
Se han iniciado acciones 48 privados de libertad en la subdelegación del Cicpc en Barquisimetu el pasado martes 5 de noviembre; Al paro se sumaron los internos del Eje del Asesinato, donde se encuentran presos 60 hombres, y posteriormente se sumaron 69 internos de la subdelegación de San Juan.
Los detenidos piden la celeridad del procedimiento y el traslado a instalaciones penitenciarias adecuadas para pagar su condena o esperar a que se celebren los juicios y se les persiga por los distintos delitos que han cometido.
“El hacinamiento, las demoras procesales y las condiciones inhumanas en las que viven en los calabozos policiales son los motivos por los que los detenidos iniciaron la manifestación”, dijo la organización no gubernamental venezolana en un comunicado de prensa este jueves 7 de noviembre.
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Dormir en el suelo y cocinar en la misma celda.
Citaron al familiar de uno de los prisioneros, Keisy Albuja, quien comentó sobre las condiciones precarias en las que viven estas personas. Uno de ellos está en celdas muy pequeñas, no tienen suficientes camas y algunos tienen que dormir en hamacas o recostados en colchones en el suelo.
Además, en esas mismas zonas tienen que cocinar los alimentos y hacer sus necesidades fisiológicas.
“El acceso al agua potable es limitado porque es a través de un tanque y no cuentan con un servicio constante. Los internos aseguran que las altas temperaturas afectan principalmente a los adultos mayores y a quienes padecen hipertensión. En ninguno de estos cuarteles generales de la policía no hay asistencia médica”, recordó el Observatorio Penitenciario.
Entre otras preguntas, piden que los lleven a otros penales de Lara, especialmente a aquellos que ya tienen condena, pero tienen hasta cuatro años en celdas del Cicpc.
“Desde OVP Observamos que no hay excusa para trasladar a estos detenidos a los centros penitenciarios de la región, ya que existen dos cárceles. Uno de ellos es el Centro Penitenciario David Viloria, conocido como Uribana, que se creó para los detenidos como imputados y el otro es la Comunidad Penitenciaria de Fénix, para personas con sentencia firme”, reiteró la ONG.
En junio pasado, reclusos de varias cárceles de Venezuela se sumaron a una protesta que incluyó una huelga de hambre. El gobierno respondió cambiando al ministro de Servicio Penitenciario, cargo para el que designó al diputado por el estado Táchira, Julio García Zerpa, del Partido Socialista Unido de Venezuela.
