En medio de la angustia, Adriana clama por información sobre el estado de salud de su esposo Ángel Godoy y sus condiciones de reclusión, mientras denuncia la zozobra que enfrentan los familiares de presos políticos en Venezuela.
Caracas. Este martes 21 de enero, Adriana Briceño cumple 13 días sin recibir información sobre su esposo, Ángel Godoy, quien fue detenido arbitrariamente el pasado 8 de enero en Los Teques. Desde entonces se encuentra en estado de desaparición forzada. “No sé si está a salvo, si está sano”, dice Adriana, secándose algunas lágrimas de la cara.
“Tengo miedo”agregó durante una declaración frente a la sede del Ministerio Público, en Parque Carabobo, a donde acudió acompañada de los familiares de los detenidos el 29 y 30 de julio de 2024 y miembros del Frente Democrático Popular (FDP), que apoyan al libertad del dirigente político Enrique Márquez, detenido el pasado 9 de enero, y del que no se tiene información.
El grupo entregó dos documentos a la Dirección General de Derechos Humanos de la Fiscalía. Además, el FDP también pide el fin del acoso a la abogada María Alejandra Díaz y al político Juan Barreto, ambas figuras disidentes del chavismo.
Ángel Godoy tiene 51 años, es colaborador y editor del portal web Punto de Corte. También es presidente del Movimiento por la Democracia y la Inclusión (MDI). Hasta el momento sus familiares desconocen los motivos de su detención.
Al menos se donde esta
Las manos de Adriana, una mujer baja, blanca, vestida con zapatillas y un pañuelo en la cabeza, tiemblan mientras habla. Según sus propias palabras, pide tener alguna información sobre el paradero de su marido.
“Le pido al Presidente Nicolás Maduro, al Fiscal General Tarek William Saab que se comunique con nosotros, al menos para informarnos dónde está, en qué condiciones se encuentra, cómo está de salud. Saber dónde está, tranquilizará en pequeña medida a su familia”. “, dice Adriana.
Adriana acude a todos los centros de detención buscando a Ángel, esperando que le confirmen que se encuentra recluido allí. Sobre todo para que puedan recibir la medicación que debe tomar Ángel para el asma.
“También tengo conmigo su informe médico”, dice Adriana. Tras un diagnóstico de Covid-19, Ángel sufre de asma, por lo que debe ser nebulizado constantemente y tomar medicamentos antialérgicos.
“Visitamos todos los centros de detención en Caracas y Los Teques, pero sin respuesta, simplemente nos dicen ‘aquí no está’, ‘no manejamos la información’, explica Adriana. Algunos de los centros de detención a los que acude cada día se encuentran las sedes del Servicio Bolivariano de Inteligencia Nacional (Sebin) en Plaza Venezuela, El Helicoide y Los Teques, así como las sedes de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la Policía de Miranda.
“Vivimos momentos de ansiedad”
“La familia está realmente angustiada, tenemos momentos de ansiedad. Es una angustia permanente. He encontrado historias desgarradoras de otras familias con personas que han sido detenidas injustamente”, explica Adriana.
Según declaraciones de testigos, Ángel ingresó al estacionamiento de su urbanización cuando dos vehículos lo rodearon. Quienes lo interceptaron estaban vestidos de negro, con capuchas y sin ningún tipo de identificación. “Àngel nunca se resistió. Yo sólo grité ‘Díselo a Adriana'”, explica Adriana.
Además de Ángel, el 8 de enero también fue detenido Rafael Carta, otro integrante del MDI. La organización no gubernamental Foro Penal contabilizó al menos 83 detenidos en enero de 2025, en el contexto de la juramentación de Nicolás Maduro para un tercer mandato presidencial. Sin embargo, en total hay al menos 1.687 presos políticos en el país.
“Me sumo a esta tragedia que están viviendo las familias venezolanas, no hay derecho a vivir así. He conocido historias de familias que pasan más de seis meses sin saber de sus familiares detenidos”, concluye Adriana.
Lea también:
Migrantes venezolanos regresan al Táchira por conflicto en el Catatumbo